Realice un comentario de la fuente iconográfica, siguiendo el siguiente orden: clasificación, descripción, análisis y breve conclusión.
La "Danza del Cogul" (5.000 a.C. aprox.)
La fuente iconográfica que se nos presenta para su análisis es una pintura rupestre localizada en el levante peninsular, concretamente en la provincia de Lérida. Está datada hacia el 5.000 a.C. Nos encontramos ante una fuente primaria ya que es una creación de los grupos humanos que habitaron esa zona en aquel tiempo. Como desarrollaremos más adelante, no se conoce con exactitud el significado de estas pinturas, aunque podríamos estar hablando de una función religiosa, ritual o simplemente narrativa.
En el centro de la imagen se observan varias figuras humanas. Nueve de ellas, por su forma, son mujeres, y en el medio se representa a un varón con un falo anormalmente agrandado. En la parte superior derecha observamos varios animales en una posición relativamente estática, mientras que a la izquierda se observan otros con mayor dinamismo. Justo debajo del grupo humano se puede observar una pieza de caza abatida con una lanza.
La sección que contiene las figuras humanas parece representar a un grupo de mujeres danzando, quizás alrededor del varón, de ahí que se conozca esta obra como la “Danza del Cogul”. Las siluetas son figurativas, pero presentan cierta estilización y esquematización. Predominan los colores ocres y negros. Hay dinamismo, tanto en el grupo humano como en algunos de los animales de caza que se representan. Las características estilísticas de esta pintura contrastan con las de la pintura cantábrica, donde los autores pintaron animales aislados, polícromos, con gran naturalismo, estáticos, en cuevas profundas y oscuras.
Por la fecha (5.000 a.C.) y por el análisis estilístico que hemos realizado, podemos afirmar que estamos ante una pintura levantina realizada por grupos humanos del Mesolítico o Neolítico inicial. El final de la glaciación Würm está suavizando el clima y los grupos humanos han avanzado tecnológicamente y están moviéndose hacia una economía productora con una mayor sedentarización. La mejoría climática explica también que se realizasen en abrigos rocosos más abiertos. Frente al carácter mágico o propiciatorio de las pinturas cantábricas, en las levantinas se aprecia un sentido más narrativo, quizás más optimista, exponiendo en este caso danzas rituales (puede que relacionadas con la fertilidad) u otros aspectos de su vida cotidiana.
En definitiva, la fuente comentada es una muestra de la evolución de la capacidad artística de los grupos prehistórico peninsulares y de su relación con el contexto y el entorno en el que vivieron, en este caso en el momento de la transición desde el paleolítico al neolítico.